Reflexión #353: Defensas listas

Posted by

Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas. (2 Corintios 10:4)

¿Qué es lo que lo hace tropezar en la fe? ¿Es usted particularmente proclive al desaliento o la avaricia? ¿Batalla con la lujuria o el chisme? Si espera hasta hallarse en medio de la tentación para luchar contra ella, caerá. Sin embargo, puede ganar la batalla contra su carne alistando sus defensas antes de que empiece la pelea.

¿Cómo lo hace? Primero, identifique los pensamientos que le incitan a pecar. A menudo hallará que sus dificultades empiezan con ansiedades profundamente arraigadas. Por ejemplo, la codicia puede resultar cuando usted teme que no tendrá lo suficiente o que se le considerará inútil. Así que observe lo que le hace sentir vulnerable y desata su reacción.

Segundo, haga como Jesús hizo cuando fue tentado y use las Escrituras como escudo. Pídale a Dios que le revele los versículos que mejor combaten los pensa- mientos que le hacen tropezar.

Entregue al Señor sus pensamientos y aliste sus defensas. Puede llevar tiempo, pero el Salvador es más que capaz de conducirle a la victoria sobre la tentación.

Señor, por favor, revélame los pensamientos que atizan mi pecado y las Escrituras que necesito para luchar contra ellos. Amén.

En su presencia… triunfe sobre la tentación.